La audición de hoy es el segundo movimiento del Cuarteto en do menor "Emperador" ( Kaiser Quartett) de Franz Joseph Haydn; quizás el título no os diga nada, pero me consta que todos la conocéis.Entre 1796 y 1797 compuso Haydn una serie de cinco cuartetos ("Cuartetos Erdödy" Op 76) para el conde Joseph Erdödy; el tercero de ellos causó gran impacto por el uso, en su Segundo movimiento, de la canción " Himno nacional del Imperio austrohúngaro" que el propio músico había compuesto con anterioridad. (¡Pinchad el enlace!)
En el vídeo veréis y escucharéis los cuatro instrumentos que constituyen el cuarteto de cuerda: dos violines, una viola y un violonchelo.
Además,este segundo movimiento Poco adagio. Cantabile , es un ejemplo de utilización de la técnica compositiva que llamamos Variación (o Variaciones ) y que básicamente consiste en la presentación inicial de un Tema musical que se modifica, adorna y transforma en sucesivas interpretaciones, pero siempre respetando las armonías originales.
En el caso que nos ocupa veremos que el tema, quizás debido a su especial importancia , siempre suena en su forma original en alguno de los instrumentos, mientras que el resto lo va "variando". Asi lo escuchamos al comienzo en el primer violín, después en el segundo, más tarde en el vilonchelo y por último en la viola. Tras ella, pasa de nuevo al primer violín en la última de las variaciones. Escuchémoslo ahora.
Y aquí, el cuarteto completo.
No quiero resultar aburrida así que os dejo con este maravilloso ejemplo del más puro clasicismo musical.
(Como quizás hubiese sido más adecuada la Sinfonía de Los adioses a tenor del Resultado del partido de ayer, añado, por si os animáis, el final de la misma con explicación incluída; muy graciosa ).
LolaMU:
ResponderEliminarComo decía una cuña de radio de broma, que bien le quedó el himno a los alemanes. Recuerdo la primera vez que lo escuché como una obra de Haydn y me quedé de piedra, era lo mismo que ponían cuando los rubios de dos metros ganaban una medalla en las Olimpiadas.
Sobre el segundo vídeo, no sabes lo identificado que estoy en este momento, en el que me estamos de vacaciones. Ya me pareció una maravilla y una delicia en su momento, al ver como esos señores tan serios cogían el portante y se iban. Es otra de las ocasiones en las que la gente podría darse cuenta que esto de la música no es un aburrimiento sin gracia. Y como le pasa a la música clásica, es capaz de cubrir todos los estados de ánimo del ser humano, pero que te voy a contar a ti. Pero siempre hay una música para cada momento. Que buena entrada y que vídeos tan apropiados.
Un saludo
Enrique
Ay Enrique qué envidia me das; yo estoy deseando coger también el portante, je, je. Bueno, ya va quedando menos. Estarás de acuerdo en que es mucho más bonito escuchar el himno en el cuarteto, es más... elegante, (como esa forma de decir "queremos vacaciones" ¿no?). Haydn, con toda su discreción, era un genio.
ResponderEliminarMuchas gracias por estar siempre ahí, Enrique, y disfruta muchísimo de tu descanso.
Un abrazo.
Precioso, el "kaiser quartett". Como dice el torero, qué bien les quedó el himno. Ese concierto de Año Nuevo no me lo perdí, bromita incluida. Es estupendo este Baremboim... Um besinho.
ResponderEliminarQuerida Lola: yo veo en mi tocayo Joseph Haydn a un maestro en cuya música palpita la alegría de vivir; en su caso –como en pocos– la sonrisa no está reñida con la seriedad formal. Quizás no arrastre la pasión de los constructores de la gran forma operística o de los sinfonistas que, con Beethoven a la cabeza, habrían de adentrarse en complejidades armónicas y honduras espirituales, pero me parece un músico luminoso, necesario para oxigenarse y desintoxicarse de vez en cuando de excesos románticos. Y para ello, sus cuartetos y sinfonías son de lo más recomendable.
ResponderEliminarUn bico y gracias por esta bella y alegre entrada.
Moitos besinhos para ti, querida Carlota, que no me olvidas. ¡Espero que disfrutes de la Lusitania tanto como disfrutas de la música!
ResponderEliminarJosé Manuel, cuánta razón tienes; verdaderamente, la música de Haydn es la del gran maestro. Siempre me ha dado la sensación de que nos va gustando más cuanto mayores nos hacemos; será que con la edad vamos abandonando las apasionadas turbulencias del romanticismo y nos hacemos más "sosegadamente" clásicos, je, je. Gracias a ti por la visita y el comentario. Bicos.
ResponderEliminarHaydn era un genio, pero el libro de Marín es un puñetero plagio de varios libros ingleses.
ResponderEliminar¡Qué descaro!
Anónimo: creo que no he tenido la ocasión ni la suerte de leer esos libros ingleses a los que se refiere (o quizás sí, pero no especifica cuáles)y por lo tanto no me siento capaz de emitir ninguna clase de juicio valorativo ni comparativo. Sí quisiera hacer la observación de que el libro incluye unas ocho páginas destinadas a bibliografía. En fin; a mi me gustó.
ResponderEliminarSaludos.
profe esta muy chuli la cancion y el video nos vemos mañana en clase un besito
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