jueves, 31 de diciembre de 2020

Aleluya, se acaba 2020




¡Que todos los mundos canten 
al Salvador, al Hijo de Dios! 
¡Alabadle, coros de ángeles,
con algarabía y santo júbilo!

Se acaba 2020, el año Beethoven, un año que no olvidaremos. Lo despedimos con este aleluya - perteneciente a su único oratorio Cristo en el Monte de los Olivos -  y con la esperanza de que el próximo sea mejor.
Lo podemos ver y escuchar  a la manera tradicional y al uso 2020, es decir, en "modo pandemia" (1)



OS DESEO UN FELIZ AÑO NUEVO 

(1) Handel and Haydn Society: coro estadounidense y  orquesta de instrumentos de época con sede en Boston, Massachusetts . Fundada en 1815

domingo, 13 de diciembre de 2020

DICIEMBRE Y SEGUIMOS

Tras varios meses de silencio en nuestro rincón musical volvemos para saludar a la ya inminente Navidad y celebrar que, pese a todo, seguimos. Seguimos en la brecha en unas aulas gélidas y ventosas,  habitadas por embozados estudiantes con mascarilla y "mantita" que no pueden cantar ni tocar la flauta y que desinfectan diligentemente sus mesas y sillas al entrar o salir porque no hay personas suficientes para realizar esa tarea. Ahí estamos; en unas extrañas clases de música  que se tornan fiesta cuando ocasionalmente salimos al exterior, a pesar del frío,  a ilustrar al vecindario con alguna cantiga medieval sin tener que ponernos para ello el abrigo porque ya lo tenemos puesto. Cosas de las pandemias.

Un aula de musica en la que no se puede cantar, un gimnasio en el que no se hace deporte, una biblioteca que no puede utilizarse porque, como el gimnasio, ahora es un aula, alumnos que solo asisten al instituto la mitad de las horas porque sus grupos son  demasiado numerosos y no pueden ser desdoblados (cosas de la mala  política, que no sabe o no quiere gestionar bien  los dineros)...y podríamos continuar un rato más contando en lo que se ha convertido nuestro día a día.

Y a pesar de todo hemos llegado a Diciembre y a la primera evaluación contentos de poder compartir conocimeinto y belleza y agradecidos a tantos alumnos que trabajan y cuyo esfuerzo y resultados nos compensan de todo lo pasado. Os felicito.

 Aquí seguiremos, abriendo las ventanas y deseando cerrar este funesto 2020.

lunes, 13 de julio de 2020

TERPSÍCORE

Terpsícore. Museo del Prado
Aquí estamos de nuevo.
Corremos un tupido velo sobre los últimos e indescriptibles meses (y sobre el peor final de curso que han visto mis ojos) para continuar con el tema de la danza. Sí; queremos seguir bailando, y por eso volvemos hoy de la mano de Terpsícore.

Según el poeta y filósofo Hesíodo, Terpsícore era hija de Zeus y Mnemóside (personificación de la memoria y madre de las nueve Musas*) y era la inspiradora de la danza y de los poemas corales; ella presidía los coros de baile y los coros dramáticos (ligados desde los inicios a la danza) y su atributo ordinario era la cítara.

La admiración y el aprecio por los temas mitológicos y de la Grecia  antigua no desapareció con el Renacimiento; muy al contrario los artistas de los estilos posteriores mantuvieron vivo su interés en ellos. Hoy veremos cómo ya en un primer barroco el compositor alemán Michael Praetorius titula una preciosa suite de danzas con el nombre de la musa.

Praetorius (1571 - 1621) fue un prolífico compositor y organista del llamado Barroco temprano que escribió, además, un famosísimo tratado sobre la práctica musical de su época (Syntagma musicum).
La obra que vamos a escuchar, Tespsichore, data de 1612 y consta de una serie de danzas encadenadas que, como bien supondréis, contrastan en ritmo y carácter.

Comenzamos con una breve Bourrée  para animar el ambiente  y seguimos con un fragmento más largo que nos permite apreciar la alternancia de danzas propio de la suite. Para los melómanos enlazamos AQUÍ  la obra completa. Es una delicia..




Sobre Michael Praetorius incluimos también el programa que le dedicaron en Música antigua de Radio Clásica.



* Las Musas son las divinidades inspiradoras de las artes; cada una de ellas está relacionada con ramas artísticas y del conocimiento. Hesíodo (escritor, poeta y filósofo de la Grecia Arcaica) habla de ellas estableciendo su numero y origen en su obra Teogonía y las presenta como hijas de Zeus y Mnemósine.
Vedlas en este relieve romano, a ver cuántas sois capaces de identificar.
Sarcófago romano del siglo II a.C (Museo del Louvre)

ENTRADAS RELACIONADAS:
Euterpe y el Epitafio de Seikilos

domingo, 12 de abril de 2020

PAVANA Y VILLANCICO

Este año, con motivo del quinto centenario de la primera vuelta al mundo, hemos estado trabajando en un proyecto de centro de carácter interdisciplinar sobre Magallanes y su tiempo. Como las terribles circunstancias en las que nos hemos visto inmersos nos impiden concluir el proyecto de manera presencial, traemos hoy a nuestro blog dos de las piezas con las que, desde las clases de música, hemos querido contribuir, como ejemplo de lo que se tocaba y bailaba en los tiempos de Magallanes.

En primer lugar, una Pavana* y en segundo lugar, un Villancico; ambas, formas musicales típicas del siglo XVI que los alumnos de tercero han sabido interpretar estupendamente.





* La pavana es una danza cortesana que se puso de moda en toda Europa durante el Renacimiento; en España está ya bien documentada desde principios del siglo XVI. Se caracteriza por ser una forma lenta, binaria y polifónica.
https://www.sevilla.org/ciudad/vuelta-al-mundo

http://vcentenario.es/actividades/exposicion-en-museo-naval-fuimos-los-primeros-la-vuelta-al-mundo-de-magallanes-elcano/


domingo, 5 de abril de 2020

AUTE...

Hoy muchos  hemos perdido algo muy importante, alguien nuestro, una parte de nosotros. Hoy sentimos un dolor amargo y profundo; hoy nos sentimos más solos y más viejos.
Se ha ido un ídolo de juventud, una voz familiar y hermosa, y las canciones de nuestra vida  han vuelto, de repente, todas de golpe, oprimiendo el estómago, el corazón y la garganta.
De entre todas esas canciones quiero compartir aquí la primera y la última; la primera que escuché y aprendí a mis seis años: ya entonces me enamoraron una letra que apenas entendía y una melodía que me emocionaba. La última, forma parte del ultimo disco suyo que compré: "Aire"; me conmovió profundamente entonces y lo sigue haciendo ahora.
Su poesía es una lección, de principio a fin. Aquí las dejo, para vosotros.




Gracias por todo

martes, 11 de febrero de 2020

EL LAMENTO DE LA NINFA

Dos ninfas en un paisaje , Jacopo Negretti (Palma el Viejo) 1513-14


En la mitología griega las Ninfas eran jóvenes mujeres que poblaban los bosques y las aguas (estas últimas también se llamaban Náyades o Nereidas). Bellas y amables, estas divinidades podían tener poderes extraordinarios y podían enamorarse incluso de un mortal; la famosa  Eco, por ejemplo, llegó a morir de amor. Nuestra protagonista de hoy llora el abandono de su amante  ante dos testigos que narran su sufrimiento y se compadecen de ella.
El compositor que pone música a su dolor es Claudio Monteverdi, al que tan bien conocemos ya y que  en el Renacimiento tardío destacó por su defensa de "los afectos", defensa que se traduce en  la gran expresividad de sus madrigales. Esta expresividad persigue reflejar al máximo, con la música, lo que la palabra dice, y para lograrlo, Monteverdi recurre al uso de la disonancia de manera intencionada como veremos. 
El texto de este madrigal se basa en una obra del famoso poeta y libretista  Rinuccini y se estructura, al igual que la música,  en tres secciones claramente diferenciadas:
  • Primera:  tres voces masculinas (dos tenores y un bajo)  relatan y describen la situación de la ninfa, que sale a pasear desconsolada.
  • Segunda: escuchamos a la ninfa cantando su dolor por el amor perdido y los comentarios intercalados de los narradores. 
  • Tercera: los narradores terminan con una sentencia sobre el amor.
Es importante destacar:
  • la diferencia melódica y armónica entre las secciones: polifonía en las voces masculinas y monodía acompañada en la sección de la ninfa.
  • el uso la disonancia  para intensificar el sentimiento cuando los narradores dicen "su dolor" (min. 0,44)  y "piangendo" (llorando) (min. 1,25).
Escuchémoslo leyendo atentamente el texto:



Aquí podemos seguirlo con la partitura y observar claramente las disonancias señaladas arriba:

 

Este triste pero precioso lamento forma parte del octavo libro de madrigales, denominado Madrigales guerreros y amorosos que fue publicado en 1638.

Entradas relacionadas:
LA PRIMAVERA

domingo, 12 de enero de 2020

ÉRASE UNA VEZ....BEETHOVEN

 Ludwig van Beethoven por Joseph Karl Stieler.  1820



"Un hombre de corta talla, de rostro muy rubicundo, ojos penetrantes y cejas pobladas, vestido con un larguísimo abrigo que le llegaba cerca de los tobillos... no obstante su desaliño general, había en esos pequeños ojos taladrantes una expresión que ningún pintor podría reproducir... La primera vez que le vi en Baden, sus blancos cabellos flotando sobre sus poderosos hombros, con esa mirada maravillosa - a veces frunciendo el ceño cuando algo le afligía, a veces prorrumpiendo en una risa forzada, indescriptiblemente penosa para quienes le escuchasen- me sentí conmovido como si estuviese frente a mí el Rey Lear o alguno de los antiguos bardos gaélicos."

(Sir Julius Benedict, 1823)






Valga esta descripción que el joven compositor alemán Julius Benedict nos dejó, para hacernos una idea bastante aproximada de cómo debió ser este gran genio de la música que, como muchos sabéis, preside nuestra aula de Música y que va a presidir también este rincón virtual durante 2020 en que se conmemora el 250 aniversario de su nacimiento.

Si recordáis, comenzábamos esta andadura bloguera con su famosa sonata para piano Claro de luna y su enorme carga de romanticismo y de ensueño. Hoy nos acercaremos a su música camerística (música de cámara; escrita para un pequeño grupo de instrumentos ) con una obra compuesta a finales de 1799 y estrenada en Viena el 2 de abril de 1800: El Septimino en mi bemol mayor Op. 20.
Escrita para siete instrumentos - clarinete, trompa, fagot, violín, viola, violonchelo y contrabajo - esta obra, que alcanzó una gran popularidad, es, como dice Edouard Herriot en su Vida de Beethoven, una despedida del pasado.

Beethoven se formó en el clasicismo y este es el estilo que encontramos en su primera etapa, a cuyo final pertenece el Septimino; lo había "heredado" de Haydn y Mozart, pero con su genialidad, transformaría esta herencia dando paso al romanticismo. "Hijo de la revolución francesa" vivió en una época de convulsiones políticas y sociales que le afectaron profundamente y que se harían sentir en su obra, como también se haría sentir la sordera que comenzó a manifestarse en 1798 y que se hizo total hacia 1820. (Volveremos sobre éste tema tan definitivo y trascendente en próximas audiciones).
En cuanto a la obra que nos ocupa, añadiremos que fue dedicada a la emperatriz Mª Teresa y que se compone de seis movimientos. El tercero de ellos, Tempo di minueto, es el que vamos a recordar hoy; su melodía encantadora y desenfadada -como corresponde a un minueto- , es una muestra de la versatilidad de su autor. Posteriormente volvería a utilizarla en el segundo movimiento de su Sonata para piano Op.49 nº 2.
La utilización de una una misma melodía o tema en mas de una obra, era relativamente frecuente entre los compositores del pasado y he querido mostrároslo con un ejemplo conocido.
Vamos a escuchar las dos, a ver a qué os suenan.

Para los "pequeseguidores", enlazo la versión más moderna (aunque sea ya del siglo pasado)




Dejo aquí también  LA PARTITURA de la sonata.

(Esta entrada fue publicada en 11 de marzo de 2010)