
Hablamos estos días en clase de cómo la música fue, desde tiempos remotos, parte inseparable de las ceremonias religiosas y de cómo, en la antigua Grecia, se le atribuía un origen divino. Es precisamente en Grecia donde nos vamos a detener hoy.
De entre los dioses del Olimpo, Apolo y Dionisos mantenían una estrecha relación con la música y además, personificaban dos posturas, dos conceptos, dos esencias opuestas y eternas: el orden y el caos.
En el culto a Apolo - dios de la armonía , la poesía, las profecías y la medicina - , la lira era el instrumento característico, mientras que en el culto a Dionisos - dios del vino y del éxtasis - lo era el aulós.
La lira - y su hermana mayor la kíthara (cítara) - eran instrumentos de cuerda punteada que se utilizaban para acompañar el canto o el recitado y también como instrumentos solistas.
El aulós, por su parte, era un instrumento de viento con doble tubo de caña, de sonido estridente y penetrante que se utilizaba vinculado a las danzas dionisíacas y al ditirambo - himo de alabanza a Dionisos que daría origen al teatro- .
Se desarrolló así toda una dialéctica entre la citarística (de cítara) y la aulética (de aulós) ¿cuál de los dos instrumentos era mejor? ¿aquél apolíneo cuyo sonido acompañaba a la poesía o ese otro dionisíaco que impide el canto y el recitado a quien lo toca , y que acompaña las danzas? ¿El que produce un sonido armónico y edificante o el que produce otro estridente y enervante?
Sobre este particular se manifestarían los sabios y filósofos sentenciando a favor y en contra respectivamente. (Rercordad la doctrina del ethos: cómo otorgaban a la música y a las escalas un carácter ético capaz de influir y de modificar las conductas del oyente).
La música pues, estaba presente en la poesía y en los himnos. Estos se cantaban en una especie de recitativo cuyo ritmo - al igual que el de la poesía en general- obedecía al acento de las palabras (pies métricos) y podían ser interpretados tanto por solistas como por coros. Precisamente los coros serían una parte esencial en el nacimiento y el desarrollo del teatro. Vedlo aquí.
En el teatro sonaba la música; los coros no solo recitaban, también cantaban (el musical es mucho más antiguo de lo que se cree).
Vamos a escuchar a continuación un famoso stasimon (canción incidental) perteneciente a la tragedia Orestes de Eurípides, en la versión de Gregorio Paniagua y el Atrium Musicae. (Aquí otra versión y otra más)
Vamos a escuchar a continuación un famoso stasimon (canción incidental) perteneciente a la tragedia Orestes de Eurípides, en la versión de Gregorio Paniagua y el Atrium Musicae. (Aquí otra versión y otra más)
Y para terminar....una última teoría, a ver qué os parece:
Bibliografía de interés: Historia de la música occidental: D.J. Grout
Historia de la estética musical: E. Fubini
Mitología clásica: Malcolm Day
Mitología universal: Juan B. Bergua
Enlaces de interés: Fundación Juan Bautista Plaza
Entradas relacionadas: Otra historia suburbana o la teoría del ethos.
La música de las esferas.