Desde el mágico Albaicín os he traído uno de los más bellos panoramas que se puedan imaginar. La Alhambra de Granada; el legado de los últimos musulmanes españoles; amada, cantada y soñada por los poetas, los músicos, los pintores y por todo aquel que la conoce.
Desde ese Albayzín contemplaba Morayma los palacios de la Alhambra, sobre los que mucho tiempo después Washington Irving escribiría:
La belleza tiene aquí su asiento, como si todavía ayer mismo hubiera morado en estos parajes.....Un abundante caudal de agua, traído desde las montañas por antiguos acueductos moros, circula por todo el palacio y colma los baños y estanques poblados de peces, brillando en los surtidores de sus estancias, o murmurando en los canalillos de sus pavimentos de mármol.
Cuentos de la Alhambra, 1828
Ese rumor del agua que inspiró, tanto a los músicos de Al-Andalus como a los posteriores, es el protagonista de la primera audición de hoy: La canción del agua (Dkhul Barwal Maluf) interpretada por Eduardo Paniagua y su conjunto de música antigua que, espero, sirva de aproximación a la fascinante música andalusí.
Cuentos de la Alhambra, 1828
Ese rumor del agua que inspiró, tanto a los músicos de Al-Andalus como a los posteriores, es el protagonista de la primera audición de hoy: La canción del agua (Dkhul Barwal Maluf) interpretada por Eduardo Paniagua y su conjunto de música antigua que, espero, sirva de aproximación a la fascinante música andalusí.
Vamos a escucharlo en dos actuaciones de su documental Sueña la Alhambra.
La primera, una preciosa muestra de la más antigua lírica tradicional castellana (que se irá desarrollando paralelamente a la andalusí y que se recogerá en los cancioneros del s. XV): Ya cantan los gallos /amor mío, vete/ ya cantan los gallos /vete vida mía...
La segunda, una tremenda soleá cargada de sentimiento y de fuerza que os dejará el corazón "encogío" (recordad que en el flamenco las formas musicales o tipos de cante se llaman palos y que la soleá es uno de los más importantes); comienza así:
Si sufres, sufre callando y no publiques tus penas, aunque te estén ahogando, que nadie se ría de ellas...
LolaMu:
ResponderEliminarSi la música pudiera transportarnos a dónde quisiéramos, yo os estaría esperando hace 800 años a la orilla del Darro para tomar un té con dulces. Y si alguien se puede cansar de Morente, que lo dudo, puede empezar con el Lebrijano. También se me viene a la cabeza Luís Delgado y ya metidos en harina, el Mozart en Egipto, aunque tenga más aires árabes que andalusíes. Dirás que soy un cursi, pero la música árabe, andalusí y sefardí me pierden. En la sefardí me sorprendió mucho Ana Alcaide, que parece que todavía toca en las calles de Toledo, simplemente porque le gusta. Creo que esta entrada va a gustar mucho a una que yo conozco.
Impresionante Morente, en la soleá y en lo que sea. Me encanta cómo incorpora la literatura con la música: le da igual la lírica tradicional que Lorca que yo qué sé...¿Cómo no va a soñar son La Alhambra, si es lo primero que ve cuando se levanta? Has tocado también otro palo que me gusta mucho, que es la música andalusí. Suelo llevarles este tipo de música (andalusí y sefardí) a los alumnos cuando estamos en la Edad Media. A partir de ahora, les mandaré a tu blog...
ResponderEliminarY no quiero soltar más rollo, pero hay que ver lo bonita que es Granada...("Si tú quisieras, Granada, contigo me casaría...")Un beso, Lola.
¡Qué maravilla! Verdaderamente, no tengo palabras. ¡Qué bien elegidos los textos, las músicas, las imágenes...! ¡Qué placer para los sentidos! Una vez más, ¡qué acertada conjunción de música y poesía! (Y de cine, porque las imágenes del último vídeo son antológicas.) Me entusiasma la labor que hace Eduardo Paniagua con la música medieval. Enrique Morente me parece un genio, y eso que el flamenco, en principio, no es lo mío. ¡Y el agua! ¿Hay algo más hospitalario y vivificante (y que más se pueda identificar con Granada) que la música del agua? En fin, no tengo palabras, como te digo. Te dejaría un poema, pero me voy a reprimir, que luego dicen por ahí que "epatamos".
ResponderEliminarUn abrazo.
Enrique: ¡cómo voy a decir que eres un cursi! ¡todo lo contrario!Además veo que sabes muy bien de lo que hablas; las alusiones son acertadísimas; Luis Delgado me encanta ¡un músico enorme! y recuperar Sefarad de la mano de Ana Alcaide es una delicia. Mozart en Egipto me pareció un... "atrevimiento acertado"; aunque siempre me disgustaron las fusiones de la música clásica con cualquier otra cosa, este caso no me desagradó (porque los aires orientales me fascinan, claro).
ResponderEliminarDe flamenco, estoy segura de que tú sabes más que yo; solo puedo decirte que lo siento como algo interior que "me toca las vísceras". ¡En mi próxima vida seré bailaora!
Un beso.
Carlota: compartimos muchísimas cosas y tenemos que sacarles más provecho ¿no crees? Me encanta que les lleves música a los alumnos porque además, en este caso, es inseparable de la lírica; siempre me ha dado pena ver como estudian las jarchas o los romances (por poner algún ejemplo) sin saber que se cantaban.
ResponderEliminarDe Granada...¡qué te voy a decir! parafraseando a Vargas Llosa...¡mi paraíso en la otra esquina!
Muchos besos.
Biblos: muchísimas gracias por tus palabras (que sí que las tienes); me encanta saber que he acertado, que compartimos tantas cosas y que tenemos gustos y pareceres similares. Si he conseguido transmitir mi pasión por lo andaluz me doy por contenta, pero creo que todos lo estaríamos mucho más si dejases aquí ese poema... aunque nos "epate". (Ahora mismo voy a "practicar" y comprobar su conjugación, je ,je)
ResponderEliminarAbrazos.
profe...PRECIOSO! yo tambien estube...y me enamore..=)
ResponderEliminarBss
LolaMu:
ResponderEliminarEspecifica más tus deseos, porque si en la próxima vida tú quieres ser bailaora y yo quiero ser torero, igual nacemos japoneses. Un saludo y hasta tu próxima entrada que ya estamos esperando.
¡Betty, corazón! Supe por tu blog que habías estado en Granada y que te había encantado. No me extraña, ¡menuda ciudad y menudo ambiente ¿verdad?!
ResponderEliminarYo ya estoy deseando volver! =D
Todo lo arábigoandaluz es muy seductor ¿verdad Bego? fascina; cualquier día organizamos una escapadita.
ResponderEliminarUn beso.