Plaza de Mayo (Buenos Aires)Antes de abandonar nuestro Buenos Aires querido, y atendiendo vuestras sugerencias, os voy a presentar a uno de los compositores mas importantes de América Latina y de la música del siglo XX: Alberto Ginastera (1916-1983).
Encontramos en su música los ecos del folklore y de las raíces culturales en los que siempre se inspiró y que supo asimilar y transmitir de una forma totalmente personal.
Como dato curioso para los rockeros os contaré que su gran fuerza rítmica y sonora sedujo a la famosa banda Emerson, Lake and Palmer que, en los años setenta adaptó el cuarto movimiento de su concierto para piano nº 1 en su disco Brain salad surgery. (Lo enlazo por si queréis ver la actuación de 1974).
También quisiera destacar su colaboración con el escritor Manuel Mújica Láinez para la composición de la ópera Bomarzo en 1967.
Nos aproximaremos a su obra con dos ejemplos de su gran capacidad lírica y de su gran maestría melódica, que evocan ese folklorismo elegante y sutil al que nos hemos referido:
la Canción al árbol del olvido, milonga perteneciente a su obra Dos canciones Op.3 interpretada al piano por José Carreras y la Danza del trigo, perteneciente a su obra Estancia (suite de danzas para ballet) interpretada por la Orquesta Sinfónica CAF de Jóvenes Latinoamericanos. bajo la batuta de Gustavo Dudamel.
Estoy segura de que os van a encantar.
¿qué existe una ópera sobre Bomarzo? Pues va a haber que buscarla. Me llamarás cursi o ridículo, puedes elegir, pero tiene un no se qué que no parece de por aquí, de Europa y si me recordara algo cercano, podría ser París. Seguro que es una bobada, pero ya sabes lo que la música me remueve la memoria. Muchas gracias por atender las "peticiones del oyente" que nos descubren tantas cosas bonitas.
ResponderEliminarUn saludo
Pues no la he encontrado, Enrique. En cuanto a ese "no se qué", es justo lo que a mi me entusiasma.
ResponderEliminarMuchas gracias a ti por estar ahí.
Pues claro que nos encanta (yo desconocía absolutamente la música de este señor). Me he ido a enlace y me ha llamado la atención eso del "Folclorismo subjetivo", quizá sea un concepto aplicable también a la literatura, pues me ha venido a la cabeza la novela de Ricardo Güiraldes, Don Segundo Sombra, en la que se recrea una imagen casi mítica del gaucho. La literatura, como la música y el arte en general de "ultramar", como señala el de la montera, tiene un algo especial que resulta fascinante. Un beso, y un placer leerte.
ResponderEliminarLola:
ResponderEliminarYo ya he encontrado parte de este Bomarzo, aunque de una forma poco confesable. En cuanto pueda lo escucho y te cuento.
Enrique
Pues quizás lo sea, Carlota, pero confieso que de literatura gauchesca solo conozco algunos fragmentos de Martin Fierro. La verdad es que este tema me parece muy interesante; ya me gustaría conversar contigo sobre ello, ya.
ResponderEliminarMuchas gracias Carlota mía y muchos besos.
Enrique, no dejas de sorprenderme! ¡Ya me voy a picar otra vez!
ResponderEliminarNo conocía a este señor. Es un placer. Y tampoco sospechaba que el duque Orsini hubiese merecido una ópera. Bomarzo: ¡qué monumento al Renacimiento! ¡Qué gozada! Abrazos.
ResponderEliminarPues yo no la he escuchado nunca, Biblos, pero creo que el torero anda tras su pista. A ver si hay suerte, aunque, me parece dificil mejorar esa novela grandiosa que es Bomarzo.
ResponderEliminarUn beso.
Efectivamente, la ópera no mejora el libro, igual tenemos que esperar a que salga la película. Es rara, en castellano, lo que ya me sorprende, con mucho dramatismo, y algo complicada de seguir... y de tararear. Al principio, muy al principio, me parecía recordar a Kurt Weil, pero rápido se me ha ido esta idea. Como ya te decía, la he conseguido de una forma poco confesable, pero creo que la borraré, para que no se me enfaden los de la SGAE.
ResponderEliminarEstupenda tu pesquisa, Enrique -por lo menos no te has quedado con la intriga- y gracias por la "pista". =)
ResponderEliminarNo me extraña que te sepa a poco, es una pieza muy cortita, Bego. En cuanto a Bomarzo si te diré qu, como todos sabemos,la sinrazón de los regímenes totalitarios suele impedir cualquier expresión o manifestación artística que no entienda o que considere sospechosa de algo. Supongo que no entendieron la música de Ginastera que les sonaría atonal, disonante y extraña (como suena la mayor parte de la música "clásica" del siglo XX.
ResponderEliminar(Lo que yo os muestro aquí es música tonal y más asequible al oído de todos).
De todas formas os pongo la dirección de un interesante artículo que os puede aclarar algo sobre el tema:
www.clarin.com/suplementos/cultura/2003/05/31/u-00302.htm
También os lo enlazo en la entrada. Pinchad en Bomarzo.
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