
Hijo de Johann Strauss y hermano de Joseph Strauss, fue precisamente Johann II quien elevó una danza de carácter popular como era el vals, a la mas alta categoría musical, haciéndola pasar de las plazas, a los salones de la corte. Traemos hoy a la familia Strauss y sus valses porque se acerca el final del año y con él, uno de los acontecimientos musicales mas importantes: el Concierto de Año Nuevo.
Cada primero de año, desde 1939, el mundo de la música saluda y felicita a todos los que la amamos con un concierto universal que se retransmite a 54 países y que es visto por millones de personas; cada primero de año nos despiertan las preciosas melodías de la familia Strauss desde la Musikverein interpretadas por la mas grande, clásica y filarmónica de las orquestas, la Filarmónica de Viena ; cada primero de año un extraordinario director nos conduce a otra época y otro lugar, evocando la fabulosa Viena del romanticismo.
Valses, polkas y otras danzas (además de alguna que otra sorpresa), constituyen el programa de un concierto en el que nunca faltan títulos como Cuentos de los bosques de Viena , Sangre Vienesa o El Danubio azul y que siempre termina con la aplaudida Marcha Radetzky (que también os traigo).
Os dejo, pues, con algunas delicias vienesas: deliciosa sangre con deliciosa tarta sacher y unas palmaditas para terminar. La velada perfecta para compartir.